Ya es parte de la vida el hecho de cambiar de casa. Todos hemos pasado por una mudanza o cuando vivíamos con nuestros padres o cuando hemos querido tener nuestro espacio. El momento de mudarse es un proceso de cambio que puede provocar estrés y nervios. Para que esto no suceda, es necesario contar con tiempo y una previa organización. Desde Espígul os queremos dar unos consejos para facilitar el proceso de mudanza y agilizar el cambio.

Todo empieza por una buena planificación.

Le ayudará a hacer las cosas de manera más estructurada y rápida. Hay una serie de cuestiones que se deben tener resueltas antes de empezar a hacer nada: las cajas, los muebles, el transporte, etc. Se deben cuadrar estas cosas para seguir los días establecidos. Porque en el caso de contratar una empresa de mudanza, todo esté planificado y no perder tiempo ni dinero.

La mudanza es cuestión de tiempo.

Proponerse hacer la mudanza con un mes de antelación evita el agobio del momento. Hacer las cosas poco a poco y de manera eficaz permitirá disfrutar del proceso y tenerlo todo listo para el día señalado.

• En este periodo de tiempo, tienes la oportunidad de descartar todo aquello que se ha ido acumulando y hacer limpieza de lo que ya no quieres.
• Puedes empaquetar por orden, de uso e importancia tus pertenencias. Por ejemplo: si la mudanza es en verano, la ropa de invierno no se utilizará, por tanto, se puede empaquetar.
• Aunque parezca obvio, llena las cajas por temáticas y / o secciones y describe lo que hay dentro con un rotulador en el exterior de la caja. Es mejor ser específicos en este aspecto. De esta manera a la hora de hacer la mudanza vigilaràs si hay algo frágil y facilitarás el trabajo a la hora de desempaquetar.

Un último consejo, para hacer de la mudanza un acto divertido, pide ayuda a tus amigos, familiares y conocidos. Puedes disfrutar mucho de la mudanza si sabes organizarte.