Es oficial, ha llegado el frío. A nadie nos gusta tener la sensación de pasar frío en casa, por eso es muy importante tener a punto la calefacción cuando llega el otoño.
Después de muchos meses sin uso, el sistema de calefacción se volverá a poner en marcha y con tal de que todo funcione correctamente, se tiene que preparar. Siempre es recomendable, durante el año, realizar un mantenimiento que ayude a comprobar el estado de la caldera o radiadores y prevenir averías.
Antes de la puesta a punto, tienes que saber qué tipo de sistema de calefacción tienes. Hay tres sistemas más habituales. Calderas de gas, calderas de gasoil y radiadores eléctricos. Todos tres dependen de energías diferentes.
Si quieres saber todos los tipos de sistema de calefacción que hay y cuál es el más eficiente, no te pierdas este post.
Pon a punto tu caldera con estos pasos:
- Comprueba que la caldera está enchufada y la llave de paso abierta y no cerrada.
- Revisa que la presión de la caldera esté entre 1,2 y 1,5 bares.
- Si la presión es menor, acciona la llave de llenado. Una vez conseguida la presión adecuada, deja la llave bien cerrada.
Pon a punto tus radiadores con estos pasos:
- Gira el caracol de evacuación del radiador y pon debajo un recipiente para recoger el agua saliendo.
- Gira el caracol en el sentido contrario. El radiador expulsará una mezcla de agua y aire. Cuando solo salga agua, ciérralo, ¡ya casi está todo a punto!
- Ahora que este purgamiento ha acabado, revisa que la presión de la caldera está entre 1 y 1,5 bares y ya estará todo preparado.
Con estos pasos lo que conseguimos es eliminar todo el aire que quede en los radiadores y permitimos que el agua caliente pase por dentro de forma uniforme y caliente correctamente.
Tienes que tener en cuenta que la calefacción llega a consumir una cuarta parte de los gastos energéticos totales de una casa. Una de las noticias que ha tenido más eco este año es la subida de precio de la luz, por lo tanto, si tu calefacción es eléctrica, tendrás que ir con cuidado y ser más eficiente para no verlo reflejado en la factura.
Si quieres saber cómo afecta la nueva tarifa de la luz, no te puedes perder este post.
Tres consejos para ser más eficientes a la hora de poner la calefacción:
- Ajusta el termostato a la temperatura adecuada: durante el día, entre 19ºC y 21ºC y durante la noche no necesitamos más de 15ºC y 17ºC para descansar bien.
- Cada grado más de temperatura incrementa un 7% tu gasto energético. Por tanto, tienes que intentar mantener una temperatura constante.
- En caso de tener alguna habitación vacía, cierra la puerta y el radiador. Así evitarás un gasto innecesario.
- Instalar un termostato inteligente para conseguir más eficiencia y ahorro energético.
Consejos para mantener la casa caliente sin calefacción
Como hemos comentado antes, si no queremos que la calefacción sea un gran gasto en invierno, podemos probar estos consejos que te ayudarán a mantener el calor dentro de la casa sin tener encendida la calefacción.
- Los textiles abrigan el hogar. Parecen insignificantes, pero poner alfombras, cortinas dobles, escoger bien la ropa de cama… pueden ayudar a mantener hasta un grado y medio más de temperaturas en el hogar.
- En las paredes más frías, puedes poner materiales como madera, tela o corcho para mantener el calor.
- No pongas nada sobre los radiadores cuando estén en funcionamiento, ya que de esta manera disminuye su rendimiento y aumenta el consumo.
- 21 grados. Es la temperatura recomendada para mantener la casa caliente pero sin tener que hacer un gran gasto energético.
En Inmobiliaria Espígul tenemos más de 30 años de experiencia en el sector inmobiliario y de construcción. Nuestras viviendas de obra nueva cuentan con los últimos sistemas con tal de conseguir la máxima eficiencia energética y el máximo confort interno.
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